Chipotle les pidió a sus clientes no introducir armas de fuego en sus restaurantes, luego que activistas en pro de la tenencia de armas recientemente llevaron fusiles automáticos a uno de sus locales en Texas.
La compañía, con sede en Denver, dijo que tradicionalmente ha cumplido las leyes locales sobre armas ocultas y expuestas. Pero en un comunicado el lunes, la compañía dijo que "la presencia de armas de fuego en nuestros restaurantes ha creado un ambiente que es potencialmente intimidante e incómodo para muchos de nuestros clientes".
Una portavoz de Chipotle no respondió de inmediato cuando se le preguntó si se trataba de una prohibición total.
El año pasado, Starbucks le dijo a sus usuarios que no podrían llevar armas de fuego a sus locales, luego que tuviese que cerrar uno de los cafés para evitar una manifestación de activistas pro armas de fuego.
