La Policía de Colorado Springs actuó de forma justificada en la muerte del sospechoso Devon Bailey, según confirmaron las evidencias encontradas en la investigación de este caso.
En una corte del Condado Teller, el jurado justificó la reacción de los oficiales al dispararle al este joven de 19 años, quien era sospechoso por un robo que la policía investigaba.
Bailey recibió disparos en la espalda y en el codo, justo cuando intentaba huir de los oficiales que antes de disparar gritaron tres veces “manos arriba”, luego de darse cuenta de que Devon tenía un arma en su pantalón.
Las cámaras corporales de ambos agentes que estuvieron en este incidente fueron revisadas minuciosamente y se pudo concluir que la reacción fue de forma justificada, ya que Bailey estaba armado y representaba un peligro.
También se pudo comprobar que uno de los oficiales habla con Bailey sobre el robo y sobre otro sospechoso al que buscaban junto a él.
Justo antes de que los oficiales se disponían a requisarlo es que Bailey empieza a correr y recibe los disparos de bala.
La investigación confirmó que el arma de Devon fue encontrada en el bolsillo lateral de sus pantalones.
EEUU
Los hechos sucedieron el 3 de agosto y Bailey murió debido a las heridas que le generaron los cuatro disparos que recibió. Tres de ellos le entraron por la espalda y el otro por el codo, según reveló la autopsia que mostró cómo las balas le perforarón el corazón, pulmón, diafragma y bazo.
La familia de Bailey ha pedido desde un inicio que se investigue a fondo el caso y han sido múltiples las protestas que se han hecho en Colorado Springs por este caso.