Paul Cary, voluntario de Aurora que murió en Nueva York tras contraer COVID-19, fue despedido con honores en Colorado, en donde una gran procesión de autos le dio el último adiós en un evento solemne y emotivo.
Este domingo 3 de mayo, el cuerpo de de Cary llegó a Denver y fue recibido por cientos de paramédicos y bomberos de Aurora que le hicieron una calle de honor, a este servidor que perdió la vida ayudando a la comunidad.
La caravana salió del Aeropuerto Internacional de Denver con rumbo al Olinger Hampden Funeral Home & Cementery y en el camino fueron cientos de ciudadanos del común los que salieron a aplaudir y rendirle un merecido homenaje a Cary, que perdió la batalla con el COVID-19 sirviendo a los más necesitados en Nueva York, ciudad más afectada de los EEUU por la pandemia.
Fueron un total de 165 vehículos de emergencia y tres helicópteros los que hicieron parte de la caravana, organizada en honor a este paramédico de Colorado que será recordado siempre como un héroe en Colorado y en todo el país.
Paul trabajó 32 años como el grupo de rescate del Departamento de Bomberos de Aurora y es recordado como un gran compañero siempre dispuesto a servirle a la comunidad.
El pasado 1ro de abril Paul viajó a Nueva York y el 21 de abril fue hospitalizado, luego de sentirse enfermo y tener todos los síntomas del COVID-19. Tras nueve días luchando contra su vida, perdió la batalla el 30 de abril cuando se confirmó su muerte de forma oficial.
Cary deja dos hijos, cuatro nietos y será recordado por su familia y por la sociedad como un héroe caído en batalla durante la pandemia del COVID-19.
