Una subsidiaria de una de las compañías de energía eólica más grandes de EEUU. se declaró culpable de cargos penales y se le ordenó pagar más de $8 millones en multas y restitución después de que al menos 150 águilas murieran en sus parques eólicos en ocho estados.
La subsidiaria de NextEra Energy, ESI Energy, se declaró culpable el martes de tres cargos menores de violación de la Ley del Tratado de Aves Migratorias en un tribunal de Cheyenne, Wyoming.
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Los fiscales dicen que se advirtió a la compañía que sus parques eólicos matarían a las aves, pero procedió sin el permiso requerido. Dicen que la compañía también ignoró los consejos para minimizar las muertes.
La presidenta de NextEra, Rebecca Kujawa, dice que las colisiones de aves con aerogeneradores son inevitables. En EEUU bajo la ley federal es ilegal dañar a las águilas.
Casi todas las águilas que murieron en las instalaciones de NextEra fueron golpeadas por las aspas de las turbinas eólicas, dijeron los fiscales. Algunas turbinas mataron a varias águilas y debido a que no siempre se encuentran los cadáveres, las autoridades dijeron que el número muerto probablemente era mayor que las 150 aves citadas en los documentos judiciales.
Entre los estados donde se reportaron las muertes de las águilas están: Wyoming, California, Nuevo México, Dakota del Norte, Colorado, Michigan, Arizona e Illinois.
